Por fin estamos en las puertas del verano. ¡Como ha cambiado el campo! Los árboles visten ya un espeso follaje, y en los prados la abundante hierba se eleva con descaro, compartiendo espacio junto a numerosas florecillas. El verde se ha vuelto el color por excelencia. El que sirve de fondo a las nuevas imágenes que presento.
Don busardo ratonero no tarda en aparecer cada vez que realizo un aporte de carnicería. Es como si estuviera esperando. Cuervos y cornejas continúan merodeando la zona, mas se muestran reacios al aterrizaje. De vez en cuando un córvido se acerca a la despensa, y la gran rapaz, que debía de acechar sobre una cercana rama, se lanza como una bala para indicarle quién tiene ahí la prioridad, quién manda en la lucha por el primer y mejor bocado.
Mirlos y estorninos se muestran un poco mas tímidos en las cercanías del hide. No así los habituales carboneros, herrerillos y currucas capirotadas. El trepador azul tampoco falta a la cita en busca de sus queridas pipas. También se dejan ver carboneros palustres, petirrojos y alguna pinzona. Los gorriones parecen haber descubierto el sitio, y un nutrido bando siempre está presente. Como regalo sorpresa, la aparición fugaz de un papamoscas gris (Muscicapa striata), al que tuve la fortuna de hacerle unas tomas.
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| Zapelaitza / Busardo ratonero |
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| Euli-txori grisa / Papamoscas gris |
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| Kaskabeltza / Carbonero común |
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| Txinbo kaskabeltza / Curruca capirotada |
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| Amilotx arrunta / Herrerillo común |
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| Garrapoa / Trepador azul |
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| Araba zozo pikarta / Estornino pinto |
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| Erroia / Cuervo |
